Cuando Alessandro, después de varios años de cárcel, recapacite sobre la brutalidad de su gesto, descubrirá que sólo el amor puede redimirle. María, después de varias horas de agonía, había pronunciado una de sus últimas palabras: «perdono a Alessandro y quiero que venga conmigo al paraíso». El horizonte se abrió para un asesino. Siempre es posible la redención de la vida más miserable.
La historia de la Iglesia es la historia del amor de Dios al mundo. Cada uno de nosotros podemos ser, como María Goretti, reflejos de amor para los demás. No es fácil perdonar, pero alguien nos perdonó primero. No es fácil tener el corazón siempre abierto, pero si nos dejamos abrazar por Dios, por su cariño, por los ojos que nos miran con amor, nuestro corazón recibirá energías insospechadas, vencerá odios ancestrales.
Para Alessandro, María Goretti fue el inicio de la salvación. Ella le abrió los ojos al verdadero significado de la cruz de Cristo. «Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen». No hacía falta más milagros para declarar la santidad de una niña de casi doce años: es santa porque supo vivir en el amor, porque supo vencer el odio con la dulzura,
con el perdón.
El amor es más fuerte que el odio. Nos lo repite, desde el cielo, una niña víctima que puede abrazar, en el seno del Padre, a quien un día fue su verdugo. El amor también puede hacer ese milagro en mi vida.
Comentario
Una historia “escandalosa” para unos. “Violencia machista” para otros. Para millones de católicos un ejemplo de heroísmo. La protagonista de esta película es una heroína real, una campesina que se hizo mundialmente famosa por defender su virginidad hasta la muerte. Esta película fue rodada en el lugar de los hechos y cuenta con muchos detalles auténticos.
Ficha técnica
Director: Giulio Base
Reparto: Massimo Bonetti, Luisa Ranieri, Flavio Insinna.
Año: 2003
Duración: 99 minutos
No recomendada para menores de 7 años