PARTE SEGUNDA: Las verdades en la economía: EL PAUPERISMO
Autor: JUAN CARLOS GARCIA
Cada ciencia humana tiene sus verdades. Porque si hay contradicciones, la afirmación es errónea y no fiable. Aparte de las observaciones básicas de fuentes de producción, y demanda u oferta de bienes y servicios, los problemas sociales de cada momento cambian los planteamientos económicos. |
Contenido
1.- Distinciones sobre la pobreza
2.- Definición
3.- Sobre el paupeismo del siglo XIX
4.- El lujo
5.- La pobreza
6.- La Doctrina social católica
7.- La Pobreza virtud cristiana
8.- Bibliografía
1.- Distinciones sobre la pobreza
Venimos de un artículo sobre el comercio internacional. Me parece un error confundir la pobreza con el comercio. La subsistencia de productos a los menores precios aumenta la cantidad demandada pero no salva almas. “Las almas[1] se degradaban y se perdían a causa del hambre clamorosa de los cuerpos” en la China de 1900. Las nuevas pobrezas son los descartados del siglo XXI. La población del país más pobre se beneficia también porque el comercio implica aumento de oportunidades y la posibilidad de salir de la pobreza. A más agentes interesados en el comercio, menores precios por las transacciones posibles. Alimento de primera necesidad y otras cuestiones en torno a la pobreza de las personas en sus sociedades, cae en el ámbito de la justicia y de la solidaridad, entre sociedades que se conocen. El libre comercio no es una retórica.
También, el tipo de cambio del comercio entre países ajusta la pobreza. Así, la población paga la pobreza del ajuste de sus gobernantes. Las personas no pueden consumir como en etapas anteriores. La inflación supone pobreza de la población y un ajuste final en los precios. La globalización[2] ha “surgido en los países económicamente desarrollados”. Sirve para superar el subdesarrollo. “Sin embargo, sin la guía de la caridad en la verdad”, puede crear daños. Observamos que muchas regiones de la Tierra “son tan pobres[3] que no pueden ofrecer nada para el trueque y cada vez son más dependientes”.
La escasez de los recursos no equivale a la pobreza. Esta equivale, pues, a la acción de escoger, la elección de bienes o la libertad de elegir. Decimos que es la escasez del medio empleado, quien determina las necesidades ilimitadas para los bienes escasos. La escasez es un elemento del precio, de un bien en un mercado. Lo fundamental de la economía son las personas en relación a sus sociedades. Es una cuestión de decisiones.
2.- Definición
La pobreza es la verdad de las cosas en su uso, Rafael Alvira, filósofo en 2011. ¿Esto qué significa? El pensamiento de la razón puede conocer la realidad que rodea al hombre. Afirma el profesor Armando de la Torre, con 83 años. Conferencia disponible en ‘you_tube’. Así, un economista debe preguntarse cómo ser rico, porque de la pobreza innata venimos todos. Adam Smith, economista escocés, se hizo esa pregunta y parece que acertó con la división del trabajo para la sociedad. Antes de llegar las cuestiones a la sociedad se debe responder por la persona, porque si esta no se salva para el día de mañana, no sirve para nada cualquier teoría. Aunque toda teoría nace con la lógica de ser desechable. Se pueden consultar los artículos de Juan Velarde Fuertes sobre la pobreza, 2004.
El derecho a alimentarse[4] es una declaración fundamental de todo hombre. El hambre no es un objetivo de la economía. Aunque en la historia, la mayoría de los hombres han pasado hambre. Hasta la revolución de los alimentos y las semillas. Todavía hay muchos[5] hombres con hambre. 25.000 hombres mueren cada día, de desnutrición, dice la Iglesia Católica. Los niños también son hombres.
Las patatas en la pobreza de Irlanda, en el siglo XIX o el “pan[6] barato”, dieron lugar al famoso teorema de Giffen sobre la clasificación de bienes. Alvin Roth, economista[7], afirma que sólo los países muy pobres no tienen conexión con la economía. Es más sencillo el pago a los agricultores de Etiopía por fabricar buen café, unido a la existencia de mercados que funcionan y están bien diseñados. La donación no resuelve totalmente los problemas de las naciones.
3.- Sobre el pauperismo del siglo XIX
La miseria es el estar por debajo de las circunstancias sociales. Hay un deber moral personal y social de salir de la miseria. El trabajo personal ayuda a salir de la miseria. El salario da dignidad a la persona; pero no evita la envidia ni la avaricia. En el siglo XIX está el pauperismo. A unos levanta, a otros le mueve al odio. Concepción Arenal, católica muerta en 1893, vio el pauperismo de los necesitados, reflejo en las prisiones de mujeres y cárceles, 1860.
4.- El lujo
En la sociedad hay una tendencia hacia la opulencia. Esto es, un apegamiento a los bienes materiales que aleja de Dios, hacia un consumismo de renta a corto plazo sin considerar su ahorro o la inversión a largo plazo. En la sociedad hay bienes objetivables que se consideran lujo. Son bienes de lujo, o matemáticamente, cuando la elasticidad de la renta de demanda, es mayor a 1. Hay lujo porque hay renta en las personas.
5.- La pobreza
El umbral de la pobreza[8] se estimaba en 60.000 dólares/año por familia de 4 miembros para ‘Medicaid and Medicare’ en los Estados Unidos, 2009. En África viven con 1 €/día. El umbral de la pobreza más cercano está en 15 €/día en España, 1980. Por tanto, el umbral de la miseria en el Planeta está valorado en 365 $/año por persona. Sólo hay 1.400.000.000 de personas en esta situación[9].
6.- Doctrina social católica
En la Iglesia hay una tendencia a la pobreza de espíritu[10]. Jesucristo dijo: “Bienaventurados los pobres[11] en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos”. El desarrollo de la doctrina social de la Iglesia durante el cambiante siglo XIX, da testimonio “en materia económica[12] y social”, del valor permanente de su enseñanza. “Dios bendice[13] a los que ayudan a los pobres y reprueba a los que se niegan a hacerlo”.
Dios es Trinitario. Es el Señor del Antiguo Testamento. Jesucristo su Hijo, convoca a todos los bautizados[14]. Estos artículos tratan de cómo una persona libre y responsable[15] sea coherente por su sociedad en el aspecto económico. La Iglesia Católica ayuda en esta coherencia. No hay que buscar vanidades terrenas útiles para los ricos y no para los pobres.
7.- Pobreza virtud cristiana
San Francisco es el varón perfecto en la imitación a Jesucristo. En 1209 dejó la sociedad opulenta de su tiempo. La pobreza es un distintivo del cristiano una guía[16]: un signo de esperanza para ir a Dios. Es un no a la codicia. Pero, no hay que ser pobres sino ricos en la gracia de Dios, aconsejaba San Agustín. En este tema este Santo aconseja el buscad lo suficiente.
En la historia vemos personas que siendo ricos en su época dejaron sus bienes para hacerse pobres de espíritu. Conquistadores, descubridores y matemáticos como Andrés de Urdaneta acabaron su vida como profesos agustinos. Ahora, se trata de decisiones de los mercados de bienes y del presupuesto del estado con “una sociedad civil[17] fuerte” en sus personas libres y responsables. “Dios nos ha confiado una tierra que podría ofrecer suficiente alimento[18] y espacio para vivir a todos los hombres”.
8.- Bibliografía
Juan Pablo II. Encíclica “Dives in misericordia” (30/nov/1980).
Lipsey, Richard G; Harbury, Crystal. “Economía Positiva”. 1998.
Varios. “Catecismo de la Iglesia Católica” (CIC). Catecismo youCat, temático. Versión digital.
[1] Pearl S.Buck. “Hombres de Dios”. Pg.193.
[2] Catecismo, CIC, youCat n.446.-
[3] Catecismo, CIC, youCat n.447.-
[4] Catecismo, CIC, youCat n.448.-
[5] Informe sobre pobreza y exclusión social en laUE_25 (año2005) Eurostat: Hay 72 millones de europeos con trabajo y excluidos del mismo. Representan el 16% de la población total. 2012.
[6] Velarde, 2009 Págs. 71, 69, 185. España, 1905.
[7] Alvin Roth. Stanford, California. Premio Nobel en el año 2012. Pg.34. Revista Capital. Artículo de Jordi Benítez.
[8] ABC, lun-22/mar/2010, pg. 29.
[9] Catecismo, CIC, youCat n.448.-
[10] Catecismo, CIC, youCat n.449.-
[11] Mt.5,3
[12] Catecismo de la Iglesia Católica, CIC, compendio n.2.421.
[13] Catecismo de la Iglesia Católica, CIC, compendio n.2.443.
[14] “La puerta de entrada al Pueblo de Dios es el bautismo” CIC, youCat n.125
[15] “Dios quiere la Iglesia porque no nos quiere salvar individualmente, sino juntos”; somos responsables unos de otros. CIC, youCat n.122
[16] Catecismo, CIC, youCat n.497.-
[17] Catecismo, CIC, youCat n.447.-
[18] Catecismo, CIC, youCat n.448.-