Leyendo las noticias que me llegan al móvil (lo del periódico ‘en papel’ cada vez se va llevando menos) pude leer una en la que aparecía el siguiente término: – ANTINATALISMO – No solo el corrector ortográfico se ha quedado desconcertado sin saber que hacer con esta palabra, sino que al buscarlo en el Diccionario de la lengua española me ha contestado lo siguiente:
“La palabra antinatalismo no está en el Diccionario”
Con esta respuesta no me ha quedado otro remedio que al final acceder a la fuente que todo lo sabe en este mundo moderno – la wikipedia de internet – y allí por fin obtuve una definición:
“El Antinatalismo es la posición filosófica, política o demográfica contraria a la reproducción y el nacimiento de nuevos seres humanos. El antinatalismo es lo contrario al natalismo”
Con esta descripción, en frío, inmediatamente saltan a la mente del lector políticas adoptadas en países con problemas de extrema hambruna, guerras u otro tipo de escenarios dramáticos similares de África, Asia o América.
Pero ese no es el caso descrito en este artículo. En esta ocasión, el antinatalismo del que se habla es el que se extiende en los países occidentales por personas que no tienen ninguna limitación física o económica que lo impida.
Del artículo lo que da “miedo” son las motivaciones que llevan a una persona a tomar esta decisión:
“Es una reivindicación feminista en el sentido de que haces con tu cuerpo lo que te da la gana, porque tienes ese derecho. Y a nivel político, descubrí – lo indica en el artículo la persona entrevistada – unos textos del siglo pasado que reivindican desde un punto de vista obrero el hecho de no fabricar más esclavos del sistema. Que se haga huelga de vientres, – y continúa en el mismo artículo – no veo justo dejar a nuevas personas en un mundo que ya es muy complicado para los adultos actuales. Además, en el 2017 todavía hay personas que pueden elegir tenerlos y otras están forzadas. Mueren personas porque no pueden abortar” (elperiodico.com)
¿Cómo hemos podido llegar a esta situación? Qué confusión de términos, conceptos, ideologías, problemas y soluciones, todo ello entremezclado en un texto de tan corto tamaño.
En esta semana que Enraizados ha publicado el informe con propuestas activas de fomento de la natalidad en España con motivo del Día Internacional de la Mujer, leer esta noticia es como una ducha de agua helada sobre nuestras esperanzas.
Por favor, léanlo, juzguen ustedes mismos y si desean comentar la noticia háganlo, así quizás lleguemos a entenderlo y encontremos entre todos una solución a esta espiral de ‘suicidio demográfico colectivo’ en la que nos encontramos.