NOTICIA MALA DE LA SEMANA: “En defensa de la familia”
Al anterior comentario publicado lo clasificaba como ‘noticia buena’, pero este segundo me he atrevido a hacerlo como ‘mala’.
¿Por qué la primera era ‘buena’?
Se hablaba de persecución pero también de personas que se atreven a exponer públicamente su ideas ‘incorrectas’, sufriendo el acoso y el insulto tanto personal como laboral.
Y, ¿por qué esta segunda es ‘mala’?
Porque hay motivos sobrados para estar preocupados.
Bajo una capa de ciencia y legalidad hay un fondo poco claro del que no paran de salir señales de alarma.
¡Para empezar!
Leyendo la definición de ‘Ideología de genero’ que publica el Centro Jurídico Tomás Moro:
“Es una nueva ideología que se basa en el odio entre sexos y como toda la ideología de odio no trata de liberar sino de destruir, no busca la verdad, sino que fomenta el engaño”.
¿Se trata de destruir la figura de la mujer?
No solo como mujer, sino muy en especial como ‘madre’ y pilar tanto de la sociedad como de la familia.
Pero, también, se ataca al hombre como ‘padre’.
Conclusión que obtengo leyendo el artículo: ‘Hijos privados de padre o madre triunfo del lobby gay’.
Del cual destaco las palabras del obispo Thomas Olmsted:
“Este mundo no necesita que nosotros, hombres, cojamos egoístamente lo que queremos, sobre todo si el precio es el bienestar de nuestros hijos.
Se supone que los hombres deben hacer lo contrario: los hombres deben proteger a sus hijos de la infelicidad, la soledad y de otras amenazas.
Los hombres de verdad no convierten en víctimas a sus propios hijos en su propio beneficio.
Los hombres protegen, absorben el estrés y las dificultades en lugar de desviarlas hacia sus hijos.
Los hombres se mantienen en la brecha [movimiento lanzado por el obispo Thomas Olmsted, de Phoenix (Estados Unidos)]”
Si se ataca a la mujer como madre y se ataca al hombre como padre, ¿dónde queda la FAMILIA?
¿La solución es crear matrimonios “sin género”?:
“Hasta hace poco, los hijos eran considerados un regalo de Dios.
Ahora, las nuevas leyes que hacen del matrimonio algo indefinido están produciendo, tristemente, también hijos indefinidos, reducidos a ser meros bienes inmuebles y fuente de plenitud.
Por un lado, su árbol familiar no consiste en una serie de antepasados, sino en un pequeño ejército de subrogados anónimos, de donantes y de abogados que sustituyen al género ausente en matrimonios sin género”
Realmente, ¿qué se quiere?
Destruir el principal pilar de la sociedad occidental y cristiana.
Destruir a la FAMILIA.
¡Ese es el objetivo de sus ataques y debe ser el fin de nuestra defensa!
Vicente Medina