Muchas cosas me rondan la cabeza en estos días. Una de ellas, es, sin duda, cómo despertar a los “dormidos”. Cómo regenerar en esas conciencias desafectadas el corazón que alimenta las ganas de compartir, hoy ocupado por el miedo a entregarse a las verdades más grandes: la vida, la familia y la libertad.
Porque si las personas dejaran de mirarse por un momento a sí mismas y se abrieran a trabajar por el bien común, amarían la vida en cualquiera de sus dimensiones, física, emocional y espiritual. Pondrían a la familia en el mayor de los pedestales y considerarían a los hijos como el mayor tesoro y regalo posible, pues son nuestro futuro.
Ayúdanos por favor a poner en hora ese “despertador” contra la indiferencia y la “tolerancia” que hay que hacer sonar cuanto antes. Estamos preparados para hacerlo y lo mejor de todo es que ya estamos en camino, pero sin tu ayuda va a resultar francamente difícil porque…
Debemos despertar al gigante dormido y recuperar el compromiso de la sociedad con el bien común.
Cuando pensamos en la campaña de las pasadas Elecciones, nos decidimos por un eslogan fácil de recordar y con profundo significado, por eso resolvimos que la mejor opción sería el ya conocido: “Vota en Conciencia”. Ahora, haciendo autocrítica, pensamos que tal vez deberíamos haber trabajado previamente el “Despierta tu conciencia.”
SOLO CON TU AYUDA PODREMOS CONSEGUIRLO
Hace pocos días recordamos el aniversario de San Ignacio de Loyola, quien pasó de ser un soñador “dormido”, cuando era un soldado que aspiraba a caballero, a convertirse en uno de los más “despiertos” en la fe tras su entrega confiada al Señor.
El santo nos recuerda que “No sólo hay que resistir al enemigo, si no también vencerlo”, pero para eso… hay que estar despierto.
¡Gracias por ayudarnos a despertar a los dormidos!