Las cosas importantes -las de palacio- suelen resolverse bastante despacio pero por fin lo hemos conseguido. El pasado miércoles, nos recibió en la Nunciatura Apostólica de Madrid, su Excelencia Monseñor Bernardito Auza y Cleopas.
Tuvimos la oportunidad de presentarle las actividades y proyectos realizados por Enraizados y también de comentarle nuestras preocupaciones, que fueron escuchadas pacientemente.
Entre otros asuntos, explicamos al representante diplomático del Papa en España el desasosiego de los miles de españoles que firmaron con profunda inquietud la petición sobre el incierto destino del Valle de los Caídos, su Santa Cruz, el colegio católico que alberga el recinto y por supuesto, por los benedictinos que lo guardan y custodian.
El Valle de los Caídos, uno de los grandes pulmones espirituales que tenemos en España y lugar sagrado de oración para rendir culto a los mártires de la guerra civil, no ha dejado de ser sistemáticamente atacado por el partido socialista y sus socios en el Gobierno desde que llegaron al poder.
Informamos a Monseñor Auza que los monjes del Valle, almas buenas del Señor, realizan una labor impagable desde hace décadas rezando por las personas allí enterradas y por la paz y la reconciliación entre los españoles. Siempre necesitarán del apoyo de todos nosotros, especialmente la oración.
También le entregamos al Nuncio los dos libros de mártires editados por la asociación: “Hogares de amor y perdón” (prologado por monseñor Munilla) y “Y Dios les abrió el cielo” (prologado por monseñor Osoro) que ojeó con verdadero interés.
Tuvimos la ocasión de precisar con el representante del Papa el trabajo que realizamos apoyando la beatificación de Isabel La Católica. Concretamente le trasladamos la devoción que España le profesa en cuanto se acerca en el calendario una fecha conmemorativa -como su nacimiento o deceso- donde casi se puede palpar el fervor popular.
Así le informamos que precisamente en pocos días tendría lugar nuestra peregrinación a Granada para celebrar el 572 aniversario de su nacimiento y que trabajamos codo con codo con la “Comisión de Isabel”, perteneciente a la Archidiócesis de Valladolid, en el empeño de llevar a la reina de España a los altares.
Tampoco dejamos pasar la ocasión para comentar con Monseñor Auza -quien anteriormente fue observador permanente de la Santa sede ante Naciones Unidas- nuestra labor inernacional sobre la que recibimos por su parte algún consejo.
Salimos de la nunciatura con una sensación muy positiva respecto a los pasos que vamos dando entre todos y reafirmados en la necesidad de trabajar muy unidos por el bien común.
Esperamos que el Señor ilumine a Monseñor Auza para que haga llegar fielmente al Santo Padre las preocupaciones que pusimos en su conocimiento. Por nuestra parte, nos sentimos muy agradecidos por el encuentro y por su acogida.
¡enhorabuena!, magnífica labor que agradecemos de corazón
Palabras de ánimo del Nuncio. Pero las palabras se las lleva el viento, sobre todo las de los políticos. Y, al fin y al cabo, tanto el Papa como el Nuncio son políticos ….
Creo muy de agradecer la labor de Enraizados. Cordial saludo.
Muchas gracias muy positiva