Bolardos en Barcelona cuatro meses después del atentado. Enraizados se lo pidió a Colau

Bolardos en Barcelona cuatro meses después del atentado. Enraizados se lo pidió a Colau

ramblasHace cuatro meses, justo después del atentado, más de 2.000 personas pedían a Colau que protegiera Barcelona, a través de la recogida de firmas iniciada por Enraizados. Cuatro meses después, la alcaldesa coloca bolardos en la ciudad. ¿Por qué tanto tiempo?

El año pasado, tras los atentados de Niza y Berlín, el Ministerio del Interior y la Policía recomendaron colocar bolardos, maceteros o muros de hormigón en zonas peatonales de las grandes ciudades para evitar atentados yihadistas como el del pasado día 17 en Barcelona.

Tras firmar en el libro de condolencias tras el ataque en la Rambla, Colau dijo que quería “una ciudad en libertad” y que Barcelona sería “impracticable” si se colocaran estos obstáculos.

Expertos en seguridad explicaron que los bolardos se pueden colocar de tal manera que un vehículo tenga que entrar en zigzag, y por tanto a menos velocidad. Además, en otras ciudades pueden bajarse para que entren las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado o vehículos de emergencia, como ambulancias.

Parece que Colau al final se ha dado cuenta.

Colau se la vuelve a liar al Ejército: Defiende a los que nos defienden

Colau se la vuelve a liar al Ejército: Defiende a los que nos defienden

Ada-Colau-Ejército[emailpetition id=»102″] El año pasado Ada Colau “invitó” a marcharse del Salón de la Enseñanza de Barcelona a los representantes del Ejército que se encontraban allí mostrando en un stand su oferta formativa. Este año ya está presionando para que no estén presentes (Esta feria se celebra del 22 al 26 de marzo). No son bienvenidos para Colau…

Defiende a los que nos defienden. Firma aquí

Tanto el Ayuntamiento como el Parlamento catalán han presentado propuestas para que las Fuerzas Armadas no aparezcan por este evento. Incluso han contactado con Fira de Barcelona, los organizadores, para conseguirlo.

Tampoco lo estuvieron ya en el Salón de la Infancia, que se celebró en la ciudad condal durante las vacaciones escolares de Navidad. Ni el Ejército, ni la Guardia Urbana, ni la Guardia Civil, ni los Mossos d’Esquadra ni la Policía Nacional…

Para Colau, sobran todos los que nos protegen… Pídele explicaciones

El Ayuntamiento quiere que no se les vea en actividades educativas y de ocio infantil.

Con esta decisión ideologizada, Colau quiere que se perciba al Ejército y a la Policía como algo negativo desde la infancia… Y, parece ser, que también quiere una ciudad sin ley. ¿O quién va a guardar el orden si no son ellos, señora Colau?

Con esta falta de caridad y de justicia, la alcaldesa ha desautorizado a instituciones que están al servicio de los ciudadanos y que todos los años, en ese servicio, sacrifican vidas para conseguir sus objetivos, que no son otros que la paz y la seguridad de todos los españoles y del mundo entero.

Con esta obsesión contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Colau está denigrando la memoria de sus miembros que han dado la vida para mantener nuestra seguridad.

Recuerda a Colau que la labor del Ejército y la Policía es positiva y necesaria. Defiende a los que nos protegen

La alcaldesa y su equipo piensan que ser militar o policía no es una profesión digna. Que a las nuevas generaciones no se les puede ocurrir tomar este camino laboral… Y por eso quieren evitar que tengan “contacto” con la infancia. ¿Se puede ser más retorcido?

La concejal de Infancia, Carmen Andrés, apoya la decisión de su jefa explicando que en Fira de Barcelona “se prohíbe la propaganda ideológica y política”. ¿Nos pueden explicar Colau y Andrés por qué es propaganda que el Ejército o la Policía expliquen su oferta formativa? Solo quien tiene un pensamiento único y no permite que los demás piensen diferente puede creerse esto.

Apoya al Ejército y a la Policía ante esta imposición ideologizada y totalitaria de Colau. Ellos nos defienden día a día

 

Colau se la vuelve a liar al Ejército: Defiende a los que nos defienden

Carta de respuesta de Ada Colau ante las 60.000 firmas por el Padrenuestro blasfemo

colauQuiero contarte la repercusión que está teniendo la recogida de firmas por el Padrenuestro blasfemo de Ada Colau. Después de conseguir más de 60.000 firmas y entregárselas en el Ayuntamiento de Barcelona, Colau nos ha enviado una carta.

Por un lado, afirma que “es de interés de este Ayuntamiento y mío como alcaldesa ocuparme de cualquier persona que considere vulnerados u ofendidos sus sentimientos religiosos o creencias (…). Como ayuntamiento, asumimos el compromiso de velar por el respeto a los sentimientos religiosos de todas las comunidades que conviven en Barcelona”.

Pero por otro sigue aplaudiendo y defendiendo el Padrenuestro blasfemo. Colau dice en su carta: “La autora del poema, Dolors Miquel, siempre ha dejado muy claro que el poema es un canto al empoderamiento de la mujer y que en ningún caso pretendía ofender ninguna creencia”.

Pues lo ha hecho… y por ello deberían pedir perdón tanto una como otra. Una por la obra blasfema y la otra por permitir dicha obra…

Continua Colau en su carta diciendo que “no ha existido –ni por parte del Ayuntamiento, ni por parte de la poetisa, ni por parte de la organización del acto- una intención de ofensa hacia los sentimientos católicos”.

No habrá intención (o eso dicen…), pero lo han hecho… Y a veces parece que como no pasa nada por mofarse de los cristianos, pues para qué van a parar… Nos quieren meter en las catacumbas sociales, silenciarnos, que no digamos nuestra opinión y que no defendamos nuestra fe cuando se ríen de ella.

Pero estoy muy contenta de que los cristianos estemos reaccionando, que defendamos nuestros derechos… Y las 60.000 firmas contra el Padrenuestro blasfemo así lo demuestran.

En Enraizados estamos orgullosos de ser católicos. Queremos que se escuche nuestra voz porque creemos que los católicos tenemos mucho que aportar a la sociedad. Pero para que sigamos siendo una voz católica en la vida pública, necesito tu ayuda.

Puedes leer la carta completa aquí: carta

 

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