Como ya te he contado anteriormente, hemos realizado tres entrevistas a expertos. Puedes verlas en nuestro canal de youtube. También estamos subiendo vídeos más cortos, más fáciles de ver y compartir o de enviar por whatsapp, con preguntas concretas. Y seguiremos subiendo más.
¿Puedes comprometerte a alguna (o a todas) de estas acciones?
En Eritrea, el gobierno comunista ha confiscado y cerrado hospitales, dispensarios y centros de salud dirigidos por la Iglesia Católica, dejando a todos sus pacientes sin atención médica y obligando a aquellos que estaban internados a volver a sus casas.
Imagínate: madres con sus hijos pequeños, enfermos, ancianos… Muchos son los perjudicados por esta medida.
Pide a Josep Borrell, ministro de Exteriores en funciones, y a la ONU, que actúen.
Una vez más, un gobierno comunista contra la Iglesia Católica… y contra los que más lo necesitan.
Estos centros se ocupaban de las personas con pocos recursos, dándoles la atención médica que requerían, y en la mayoría de los casos, de forma gratuita. Por ejemplo, el pueblo nómada de Dancaria se ha quedado sin el único médico que había en la región.
El gobierno ha decidido aplicar una ley de 1995, que no había entrado en vigor nunca, por medio de la cual se apropia de las estructuras sociales de la zona. Así, al no querer entregar al gobierno estas obras de servicio para los más necesitados, han sido clausuradas sin tomar en cuenta el daño que se ocasiona a la población.
¡La comunidad internacional debe hacer algo! Es nuestro momento de pedírselo tanto al ministro de Exteriores de España como a la ONU.
Tu firma llegará al Ministerio y al Relator Especial de Naciones Unidas para temas de Salud.
Los obispos de este país publicaron el pasado abril una carta pastoral pidiendo un proceso de reconciliación nacional que garantice la justicia social para todos. Pero al gobierno comunista no le ha gustado. ¿Puede ser esta medida una represalia?
Por orden del gobierno, están cerrando todos los hospitales, que curaban a la población más necesitada de Eritrea.
¿Te imaginas que el único hospital de la zona donde vives fuese cerrado? ¿O que el único que podías permitirte por tu situación económica, de repente fuese clausurado? ¿Imaginas que tu hijo necesite estar internado y sea enviado a casa por el capricho de unos políticos?
Esto es lo que están viviendo las personas en Eritrea, y todo simplemente porque no quieren desde el gobierno que la Iglesia Católica dirija estos centros.
Podemos ayudar a que la comunidad internacional presione al gobierno de Eritrea. Este pueblo no merece pasar por esta situación por el simple capricho de un gobernante. ¡El egoísmo del ser humano puede llegar a ser inmenso!
Puede que la aprobación de la eutanasia en España esté más cerca que nunca. Por ello ahora debemos defender aún con más ahínco la vida desde su inicio hasta su final natural. Porque la dignidad de la persona no la marca una enfermedad, sino el hecho de ser persona.
“Pienso que ahora estamos usando mal la palabra dignidad, la dignidad es un valor inherente a cada ser humano, a cada persona, entonces todas las personas son dignas simplemente por ser personas […] Así que ¿una enfermedad te va a hacer indigno? Evidentemente creo que no, no tiene esa potestad la enfermedad”.
Esta frase está sacada de la entrevista que hemos realizado a la doctora Herminia Valladares, coordinadora de cuidados paliativos en Guadalajara. Te traemos un nuevo vídeo con más respuestas sobre la eutanasia, más información para poder argumentar en cualquier campo que se nos plantee.
En este enlace tienes la entrevista completa:
Porque tenemos el ejemplo de lo que sucede ya en otros países, sabemos que la aprobación de la eutanasia se desliza hacia una pendiente resbaladiza, hasta permitir que chavales a partir de los 15-16 años puedan solicitar la eutanasia sin el consentimiento o conocimiento de sus padres. Y más aún, “hay asociaciones que abogan para que cualquier niño, si se le considera maduro, pueda decidir solicitar la eutanasia”.
La eutanasia es un peligro para todos: para los niños, para los mayores, para los discapacitados… “Al final no decide el enfermo, deciden otras personas por él; al final no se aplica solo en ese determinado momento, sino que se está yendo más allá y se está utilizando como un medio legal para terminar con una vida sin más”, explica la Doctora Valladares.
La eutanasia no tiene por qué ser la respuesta. Como bien verás en esta entrevista, paliar el dolor del paciente, así como de la familia, es una meta realizable que permite a las personas combatir el desánimo en esos momentos de sufrimiento.
Sabemos que el PSOE lleva persiguiendo aprobar una ley sobre eutanasia en España desde los años de Zapatero, por suerte aún no lo consigue (¿te acuerdas cómo apoyó casi el gobierno en pleno el estreno de la película “Mar Adentro”?).
Sin embargo, ahora más que nunca, sabemos que el riesgo de que aparezca esa ley es muy elevado y, por eso, debemos de estar más preparados que nunca para saber como defender nuestra postura a favor de la vida y en contra de la cultura de la muerte.
Por eso, te invito a ver esta entrevista a Carlos Álvarez, portavoz de la asociación Vida Digna.
Son 18 minutos que quizás puedes ver mientras vas en el transporte o en un ratito que tengas.
La interpretación que hacen los políticos sobre esta “buena muerte” hace que se perciba como un acto de caridad para el paciente, sin embargo, nos dice Carlos Álvarez que “se acaba dando la eutanasia, dentro de la ley, a gente con cansancio vital o con depresión”.
Y además se promueve el poder deshacerse de una vida simplemente porque estorba económicamente al sector de la salud.
Es importante saber y recalcar que hay opciones y alternativas, los cuidados paliativos. Ese gran desconocido de la medicina, que presenta de verdad un tránsito digno hacia la muerte:
“Se componen multidisciplinarmente, de muchas personas, no solamente intervienen médicos, también enfermeras, también trabajadores sociales. Porque los cuidados paliativos no solamente atienden al enfermo, sino que atienden también a su familia; se trata de ayudarle a que llegue al final de su vida, haciéndole consciente de que esa vida es valiosa incluso hasta los últimos momentos”.
Si se legaliza pueden ocurrir muchas cosas, “aparte de una desconfianza en la medicina […], a medida que aprobamos el que se pueda matar por un motivo, se produce la cosificación de la persona, ya solo valemos en tanto en cuanto producimos”.
Conozcamos a fondo el tema, luchemos para que la vida adquiera a los ojos de la sociedad el valor que tiene y que no se mercantilice.
¡No dejemos que estas consecuencias lleguen a España, como lo han hecho ya en Holanda o Bélgica!
Este fin de semana son las elecciones municipales, autonómicas (en algunas comunidades) y europeas.
Por esa razón hemos hecho un informe sobre los programas electorales para las candidaturas europeas. Debemos tomar conciencia de la importancia que tienen estas votaciones: las elecciones europeas no son un hecho lejano a la realidad española; al contrario, representan una oportunidad de que los valores cristianos, intrínsecos a las raíces europeas, se vean defendidos por diputados que los representen.
Hemos analizado los programas de aquellos partidos que, según las encuestas, tienen mayor posibilidad de obtener representación en el parlamento europeo, en base a los criterios que un católico y toda persona de buena voluntad puede tomar como criterios de enjuiciamiento para decidir en conciencia su voto:
Protección de la familia: políticas familiares. El problema de la natalidad.
Diálogo con las Iglesias y las comunidades religiosas (libertad religiosa)
Economía al servicio de las personas, especialmente de las más vulnerables
Migraciones
Defensa del bien común de España en la UE
Los cuatro primeros puntos están tomados de la declaración de la Comisión de Conferencias de Obispos de la Unión Europea (COMECE) de cara a estos comicios. El quinto se ha elegido porque el público objetivo de este informe somos los ciudadanos españoles.
Dentro de estos criterios, ADÑ es el partido que mejor puntuación obtiene, 15 puntos sobre un total de 20, destacando sobre todo sus propuestas en materia de familia. Por detrás de él se encuentra Vox con 14 puntos. En tercera posición se encuentra el PP con 11, seguido de SAIN (Solidaridad y Autogestión Internacionalista) con 10 puntos. Por debajo de ellos, Ciudadanos (6 puntos) y PSOE y Podemos (4 ambos) cierran la clasificación.
Hemos obviado en esta ocasión a todos los partidos de corte nacionalista, que en previos análisis han demostrado tener una proximidad prácticamente nula a los criterios que se evalúan.
Descárgate el informe de las elecciones europeas aquí.
Durante la campaña electoral, además, desde Enraizados hemos pedido a los candidatos que se adhieran al “Manifiesto Familias más fuertes para el florecimiento de las sociedades”, de la Federación de Asociaciones Familiares Católicas de Europa (FAFCE), de la que formamos parte. En este manifiesto se propone a los candidatos comprometerse a defender los siguientes puntos:
Pacto europeo hacia la natalidad.
Perspectiva de familia en todas sus decisiones.
Promover las voces de la familia.
Una economía al servicio de la familia.
El trabajo digno es necesario para cada familia.
Conciliación de la vida familiar y profesional.
Reconocer la complementariedad entre hombre y mujer.
Respetar y promover la institución del matrimonio.
Respetar la dignidad de la persona desde el inicio hasta el final natural de su vida.
Únicamente hemos encontrado respuesta favorable en VOX y ADÑ. El cabeza de lista de VOX se ha adherido al manifiesto confirmando que sus compañeros de lista también lo apoyan. En ADÑ, el cabeza de lista, Martín Ynestrillas, nos ha explicado que apoya todos los puntos a excepción del número 10, con el que tiene sus reservas, por temor a un respeto excesivo de las decisiones de padres no cristianos.
No podemos dejar de participar en estas elecciones y con ello contribuir a que nuestra lucha por la defensa de los valores cristianos se pueda hacer desde las instituciones, que la sociedad civil se vea respaldada y que no reine en la política el ambiente de libertinaje desmedido y sin rumbo.
Nuestra voz ha llegado a los políticos, ya no pueden hacer oídos sordos, no dejemos que olviden que estamos aquí, detrás de ellos, para exigir que cumplan con su compromiso de servicio a la sociedad.
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