FIRMA por Diego Valencia, un mártir de nuestros días
DIEGO VALENCIA, UN MÁRTIR DE NUESTROS DÍAS
¿Recuerdas a Diego Valencia?
Era el sacristán de Nuestra Señora de la Palma, el mayor templo de Algeciras.
Tenía 65 años cuando fue asesinado de un machetazo por defender la fe católica, su Iglesia y a los fieles allí reunidos. Llevaba 16 años realizando el servicio.
¿Nos ayudas a promover su causa para que la Iglesia Católica le reconozca como mártir?
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Nos sumamos al esfuerzo del P. Marina para ensalzar la memoria de Diego Valencia y demostrar que fue martirizado por defender su fe.
¡Comparte la petición!
El pasado 25 de enero Yassine Kanjaa, de origen magrebí, entró ofuscado al templo gritando “¡Alá es grande!” vestido con una chilaba negra. Derribó todo lo que se encontró a su paso, imágenes, velas y otros enseres de la Iglesia a golpe de machete. Se dirigió al altar, donde estaban dispuestos los distintos elementos para la celebración de la misa, y los arrojó al suelo.
Inmediatamente, Diego Valencia le salió al paso y le hizo frente invitándole a que saliera del templo. El asesino, sin embargo, no se achantó y le agredió con fuerza. Ante la gravedad de los hechos, el sacristán salió de la Iglesia a la carrera donde a los pocos metros fue alcanzado por su asesino. Tras golpearle en la cabeza, lo remató en el suelo con un machete de grandes dimensiones.
El P. Juan José Marina, párroco de Nuestra Señora de la Palma, quien salvó la vida porque en el momento de los hechos se encontraba celebrando unas confirmaciones en otra parroquia, ya se ha puesto en contacto con el obispado de la Diócesis de Cádiz y Ceuta para promover la causa de Diego Valencia.
Cuantas más personas pidamos al Obispo de Cádiz, Monseñor Rafael Zornoza Boy, que promueva esta causa a las más altas instancias, más pruebas tendrá del apoyo popular que ha suscitado el martirio del sacristán de Nuestra Señora de la Palma de Algeciras.
Su asesino acabó con su vida. Nosotros no permitiremos que el tiempo acabe con su memoria y su extraordinario acto de valor suscitado sin duda por el Espíritu Santo. ¡Ayúdanos a conseguirlo!
No dudes en hacerle llegar esta petición a tus familiares, amigos y conocidos. Todos debemos contribuir para promover que la Iglesia siga sumando testigos a la causa de nuestro Señor.
Si Dios quiere, y gracias a tu ayuda, Diego Valencia tendrá el reconocimiento merecido a su sacrificio.